Acabar con la Epidemia de Opioides
La adicción es una enfermedad, y las compañías farmacéuticas codiciosas y la falta de supervisión del Congreso la exacerban. La epidemia de opioides ha sido un problema creciente durante décadas, pero en los últimos 10 años se han triplicado las sobredosis fatales de opioides a más de 3000 por año en Illinois. Las compañías farmacéuticas se llenaron los bolsillos ofreciendo analgésicos innecesarios a las familias de todo el distrito, mientras que las farmacias ganaron millones surtiendo recetas incorrectas. Es hora de que comencemos a castigar a los malos actores, no a las personas que luchan contra la adicción.
Qasim se compromete a:
- No aceptar dinero de las compañías farmacéuticas o de atención médica, porque él está con las víctimas de esta crisis, no con sus facilitadores.
- Tratar la adicción como la enfermedad que es e inviertir en centros de tratamiento y rehabilitación en lugar de castigar a las personas que luchan contra la adicción con penas de prisión.
- Despenalizar la posesión de cantidades no comerciales de heroína y fentanilo y derivar a los que enfrentan adicciones a centros de tratamiento.
- Dar fondos a siitios de inyección supervisados.
- Romper el velo corporativo para responsabilizar financieramente y personalmente a los ejecutivos de las grandes farmacéuticas por la prescripción excesiva de opioides, la adicción y la muerte, de modo que las corporaciones multimillonarias como Purdue y Walgreens enfrenten una responsabilidad significativa por permitir la crisis de los opioides, no se vayan pagando una multa.
- Gravar a las empresas de opioides, como las tabacaleras, para financiar los centros de tratamiento y rehabilitación de adicciones.
- Proporcionar fondos adicionales para Narcan/Naloxone para los primeros respondedores y los centros de tratamiento de drogas en todo el país.